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Las agresión entre gatos domésticos están estrechamente relacionadas con el comportamiento natural de la especie y son una parte normal de la depredación, el juego y el conflicto social. Como especies autosuficientes y cazadores solitarios, el gato evita el conflicto físico como una amenaza a la supervivencia, es decir cualquier lucha abierta podría provocar lesiones, incapacidad para cazar y en consecuencia la muerte. El sistema de comunicación del gato: la vocalización, postura corporal, expresión facial y el marcado aroma se utiliza sobre todo para evitar el conflicto y la tensión difusa. Sin embargo, la lucha va a ocurrir si las circunstancias dictan que la única opción o incluso posiblemente cuando el agresor está convencido de que el oponente no tomará represalias.
Hay una serie de razones por las que las agresiones se llevará a cabo entre los gatos ya sea en el hogar o fuera. La mayoría de los gatos intentarán defender su ámbito de hogar o por lo menos la zona que consideran más importantes para ellos, contra la invasión de otros. Los gatos de la zona pueden buscar activamente oportunidades de ampliar su territorio y a gatos con menos confianza representan un blanco fácil. Si los gatos no pueden o no tienen éxito en la defensa de su área, entonces tienen un peligro potencial ya que sus defensas han bajado de manera significativa y los paseos al aire libre se hacen demasiado peligrosos.
Una ventana o puerta abierta podría permitir a gatos extraños invadir la casa y esto puede llevar a un comportamiento agresivo de ambas partes.. Tales invasiones también pueden causar fricción entre los miembros de un mismo hogar, ya que eleva su ansiedad y puede potencialmente agravar tensiones que previamente se han mantenido a un nivel tolerable. El volumen del ruido de los gatos en el vecindario también puede tener un efecto similar, ya que su presencia se convierte en una presión que no tienen poder para vencer.
Algunos gatos recurren a la agresión activa más rápido que otros, dependiendo de su genética, el sexo y las primeras experiencias.
Cualquier hogar con hembras de cría también pueden experimentar episodios de agresión, particularmente cuando las reinas están protegiendo a sus cachorros. Estos entornos pueden ser focos de tensión, a menudo se muestran pasivas ya que no es con frecuentes una mezcla de los gatos enteros y castrados.

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