Los cachorros tardan varios meses en estar completamente vacunados, en este tiempo muchas personas se preguntan si pueden bañarlos por riesgo de contagiarse de enfermedades como el moquillo. 

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El moquillo es una enfermedad viral muy contagiosa para los perros y que afecta al aparato gastrointestinal y al aparato respiratorio. Este virus se encuentra en el ambiente, en los neumáticos de los coches y en otros perros, por eso es importante evitar el contacto con otros animales. Pero si el cachorro está sucio no hay ningún problema para bañarlo desde el primer día.
Sí que hay que tener en cuenta que si está mamando puede perder su olor característico y puede ser rechazado por su madre, para evitarlo, se aconseja envolverlo en una manta o paño antes de acercarlo de nuevo.

Consejos para el baño
Preparar el baño con agua caliente para que guarde la temperatura, utilizar un champú apropiado para el tipo de pelo del cachorro y si es invierno, secarlo con un secador de pelo con aire no muy caliente y evitando que se introduzca en sus oídos.
No frotar el cuero cabelludo para no raspar la piel y dejar para lo último la cabeza, evitando que entre champú en los ojos y en los oídos.
Es aconsejable asociar este momento con un juego y un momento feliz para que no tengan miedo, para ello se le debe motivar con voz dulce y premiarlo al final con algo que le guste.

Frecuencia
No existe una norma regulada para bañar a los perros aunque se recomienda que se haga entre una y dos veces al mes, dependiendo del tipo de pelo.
Hay olores de los perros que no se erradican con baños continuados y sí que puede provocar que se reseque la piel y que cree caspa.
La raza del animal es un factor para determinar la frecuencia, ya que el baño siempre provoca una muda de pelo, que tiene mayor importancia en los canes de pelo doble. Si el perro se ensucia mucho por su actividad o por los lugares que frecuenta, se recomienda usar algún tipo de champú en seco o en polvo y cepillarles con mucha regularidad.