La cría de perros de raza y la clasificación lógica de los perros según su raza surge ante la aparición de gran variedad de tipos caninos, que el hombre necesita ordenar. Con el cruzamiento natural de diferentes razas (que derivan en el nacimiento de otras nuevas, como el Eurasier) y el surgimiento de los perros domésticos, gracias a la capacidad del lobo para adaptarse al entorno y la vida en sociedad, comienza la necesidad de organizar las razas caninas según su tamaño, color, tipo de pelo, constitución o utilidad del perro criado.

 

Para ello, cada país ha diseñado a lo largo de los años sus propios estándares de clasificación, surgiendo así distintos organismos de carácter nacional o internacional dedicados a la cría de perros de raza. Entre estas instituciones, destaca el FCI (Fédération Cynologique Internationale), cuya sede está en Thuin (Bélgica) y que reúne a todos los organismos cinológicos nacionales de Europa. La función principal de esta asociación consiste en crear estándares fijos de razas caninas y crear criterios fijos de exposición y cría entre los países adheridos, que son de hecho la mayoría de los países en los que se da la cría de perros de raza. Los países de origen de las razas caninas que van surgiendo fijan unos estándares que, una vez aceptados por la FCI, deben ser acogidos por el resto de los países miembro.

Además de establecer criterios de cría para las distintas razas de perro (a los que los criadores deben acogerse para poder inscribir sus cachorros en el libro de la institución), las asociaciones de cría de perros de raza se encargan de fijar principios de protección de los animales con los que controlar la cría y de salvaguardar la pureza de la raza. Como garantía de la misma, se entrega a cada cachorro un pedigrí, documento sobre su origen y antepasados que acredita la calidad y valor del perro.

En la cría de perros de raza, es muy importante tener en cuenta que cada tipo canino es distinto y por tanto, necesita cuidados diferentes para crecer sano y desarrollar su carácter de la manera adecuada. Por eso, lo más importante cuando compramos un perro es tener en cuenta que una raza no es una marca comercial, y que el cuidado de nuestro cachorro determinará su vida futura.

Y sobre todo recuerda siempre que hay un perro adecuado para cada amo, y encontrar el tuyo puede ser el principio de una larga y bonita convivencia.

Consejos antes de comprar o adoptar un perro de raza

 Antes de comprar un perro, hay ciertas cuestiones que debemos plantearnos. Lo primero es si de verdad tenemos el tiempo, espacio, dinero y deseo necesarios para criarlo como debemos, más allá de ser un simple capricho. Si una vez que nos hemos planteado todo esto, aun estamos decidimos, es el momento de pasar a la acción, pero, ¿Qué debes saber antes de comprar un perro?

En un principio, puedes dejarte guiar por el aspecto físico de un perro como criterio principal para adquirirlo: Error. Más allá de la apariencia, debes tener en cuenta las necesidades y particularidades del perro que vas a adquirir, de forma que antes de comprarlo ya sepas a lo que te enfrentas (para evitar sorpresas desagradables que pueden acabar en abandono). Por eso, nuestro primer consejo es que elijas un perro de raza, ya que, a diferencia de los híbridos, éstos nos permiten saber de antemano y con bastante seguridad las características y peculiaridades de nuestro cachorro, por lo que podemos prever con facilidad los cuidados que necesitará.

A continuación, llega el momento de elegir la raza de perro que prefieres, para lo que debes tener en cuenta el tamaño o el entorno en el que necesitan vivir. En este punto, evita las razas cuyo físico limitará la calidad de vida de tu cachorro, con lo que conseguirás no sólo un perro feliz, sino que ayudarás a terminar con su cría al no fomentar la demanda. Una vez elegida, es el momento de informarte sobre la raza de perro que vas a comprar: acude a las asociaciones cinológicas, consigue contactos informales, adquiere libros especializados en dicho tipo canino, los tipos de seguros para perros que necesita (seguro de responsabilidad civil para perros o seguros veterinarios) etc.

Una vez que has hecho todo este trabajo previo, llega por fin el momento de comprar tu cachorro. Pero cuidado: dónde hacerlo también es importante. Te aconsejamos que visites varios criadores y compares, comprando finalmente tu perro en el lugar donde creas que ha estado mejor atendido. Para comprobarlo, debes fijarte en el precio (las rebajas no suelen ser comunes entre los criadores profesionales y con prestigio) y sobre todo en el comportamiento del cachorro ante  el criador, pues debe mostrarse tranquilo y cómodo. De lo contrario, puedes encontrarte con un perro con dificultades para adaptarse al entorno e, incluso, un perro peligroso que pueda suponer una amenaza para las personas. Además, ten en cuenta también el estado de salud del cachorro que vas a comprar. es recomendable que pidas radiografías de los padres y que te asegures de que éstos no sufrían enfermedad hereditaria alguna, que son comunes en razas de perros grandes.  Si adquieres un perro de dimensiones grandes de más de 20kg o perro considerado PPP, debes contratar seguros para perros peligrosos que le cubrirán de la responsabilidad civil que usted tiene si su perro ocasiona un daño a un tercero.

Por último, una vez que has comprado tu cachorro, sólo te recomendamos que comiences a disfrutar de él y que lo cuides como se merece. Con estos consejos, estás listo para ello.